
¿Por qué agentes Wuxing y no elementos?
En semanas anteriores hablamos del Yin y Yang, entendimos que son complementarios pues YIN lleva en su interior YANG, así como el YANG lleva en su interior YIN, siempre están en movimiento, por eso no se debe considerar absoluto. Es aquí y entendiendo esto que nacen las facetas de estos movimientos y que la misma naturaleza nos las muestra, a través del WuXing, donde Wu significa “5” y Xing significa “acciones o ejecuciones” utilizan las formas, del fuego, tierra, metal, agua y madera que son agentes del universo.
Por lo tanto, cuando se utilizan en el hogar, estas formas están trabajando como representantes del universo adentro de nuestra casa con el fin de cumplir una acción en ese espacio
Si utilizamos el término “elemento” estaríamos sólo enfocándonos en su forma y viéndolo como algo estático e inmóvil, lo que esta incorrecto, pues ya sabemos que Wuxing nace de los dos principios del Yin y Yang, siendo un instrumento para que el Qi (energía), este en constante movimiento y se utilizan para generar cambios y armonizar espacios. Lo inmóviles o estático, no se logrará mantener activa la energía.
Es por ello que no podemos considerarlos cómo 5 elementos, puesto que vienen de los 5 movimientos o fases de la acción del Yin y del Yang. Otra de las definiciones de Xing es “marchar o andar” que al unirlas con el 5 se puede interpretar como las 5 maneras de andar.
Estos 5 agentes, Fuego, tierra, metal, agua y madera ordenan las múltiples formas de vida y con sus movimientos energéticos incentivan a que ese movimiento sea armónico.
Fuego: Su energía de transformación e incandescente que se eleva al cielo, nos invita a la transmutación a trascender, a mostrarnos, brillar y elevarnos, como la luz del fuego y su forma triangular que ésta va formando con sus movimientos.
Tierra: Su energía está relacionado con el cobijo, el parir, el nacimiento y el abrazo maternal, nos llama a recibir y acoger tal como lo hace día a día nuestra madre tierra al recibir las semillas para luego entregarnos sus frutos, de ahí que su forma cuadrada.
Metal: Su energía está relacionada con la condensación, la coagulación, como un imán que atrae hacia el centro, hacia el interior, este agente circular nos invita con su vibración que todas nuestras intenciones se vayan a un punto central, uniéndolas a nuestro favor.
Agua: Su energía desciende y empapa, es ondulante o de formas irregulares, es la energía que conduce y atesora el Qi. Nos invita a la intuición, la voluntad y el autoconocimiento, ir a lo más profundo, llegar hasta donde ya no pueden estar peor, solo queda buscar formas para resolverlas.
Madera: Su energía es creciente, expansiva, al igual como lo podemos en el bosque, con los arbustos o arboles cuando se desenvuelven con toda libertad. Nos llama a que con la energía pujante del sol logremos florecer, expandirnos y dejar sacar esa energía hacia afuera, al igual como lo hacen esos pequeños brotecitos que aparecen en la tierra y así en un futuro lograr a ser robusto y estables como los troncos de los árboles. De ahí que se forma es rectangular.
Como pueden ver cada agente trabaja con la energía de una forma distinta, en una asesoría de Feng Shui se busca que el Qi siempre estará en constante movimiento, y por ende los agentes. No basta sólo con mirar el elemento (sustantivo), se debe mirar más allá, la acción y energía que entrega cada elemento, es ahí donde pasa a ser agente. Logrando tener conciencia de esto, habrá más claridad para diferencias entre agente y elemento.

Evelyn
Fuente: Escuela Chilena de Feng Shui Enzo Cozzy y Sylvia Galleguilos